Cuando parecía que se llevaba un punto para Corrientes, el karma de las lesiones volvió a jugar una mala pasada y Dálmine lo ganó en el sexto minuto de agregado. Fue 1-0 y un cachetazo para el equipo de Federico Domínguez.
No es partido de Boca Unidos si no termina con algún lesionado. Y así fue, sobre el final se sintió dolido Juan Ojeda y decidió terminar de igual manera el partido pero sucedió lo peor: Mazzocchi tiró un pelotazo que parecía fácil pero ante la dificultad del arquero, le pasó por arriba y los correntinos lo perdieron en la última jugada.
No hubo mucho más allá del gol. El desarrollo del juego fue digno de un empate, donde el juego de ambos equipos reflejaban la campaña irregular que han hecho hasta acá.
Boca Unidos tuvo la más clara en el primer tiempo, cuando Luciano Recalde salvó en la línea al conjunto Violeta tras una buena jugada de Carlos Ross, que ya había eludido al arquero.
En el complemento, el trámite no se modificó y los equipos ni siquiera podían pasar al área rival promediando los 30’. El ingreso de Juan Mazzocchi en el local fue la gran clave del partido.
El juvenil de 19 años, demostró en un par de jugadas que está en condiciones de pelear un puesto de titularidad. Avisó a los 46’ con una gran jugada individual, llegó al área, le pegó y la pelota besó el palo derecho de Ojeda.
Sobre el final, se lesionaron el arquero Juan Ojeda y el volante Diego Galeano. Eso obligó a Testa a seguir agregando minutos. No había más cambios, el uno Aurirrojo tuvo que terminar el encuentro y así le fue: Pablo Ruíz remató desde muy lejos, Ojeda se quedó clavado y se le colgó en el ángulo.
Increiblemente, el equipo de la Ribera se quedó con las manos vacías. No hizo mucho para ganar, pero tampoco para perderlo. La mala racha de visitante sigue y las lesiones no paran de atormentar al entrenador. El domingo cerrará el año ante su gente, recibiendo a Atlético Paraná.
Foto: elviola.com.ar