El Aurirrojo tuvo que conformarse con otro empate, esta vez ante Crucero del Norte, porque los errores defensivos se pagaron con goles. El coraje alcanzó para llegar a la igualdad pero faltó perspicacia y profundidad. Boca Unidos culminó una primera rueda con en la que no pudo hacer pesar el factor localía y lejos de los puestos protagónicos.
Por Adolfo Pereira
Boca Unidos enfrentaba al último de la tabla, Crucero del Norte, en un duelo que no se avisoraba sencillo, pero se presentaba como una buena posibilidad para volver a la victoria e intentar matenerse en zona de clasificación.
Arrancó bien el dueño de casa, penetrando el cerco propuesto por los misioneros con pases precisos en las inmediaciones del área. Justamente, de una buena conexión entre Gabriel Morales y Alejandro Leani llegó la primera aproximación que terminó con un remate elevado del lateral izquierdo ribereño, cuando se jugaban dos minutos y medio.
Un rato más tarde, el rosarino Morales encaró por izquierda, con un movimiento de cintura se deshizo de Alejandro Pérez y Guillermo Bachke interceptó el buscapié que tenía como objetivo a Carlos Salom. En la siguiente, el propio Salom aprovechó un despeje corto de la defensa y, tras un buen control, sacó un derechazo que exigió una notable respuesta del guardavallas misionero.
Después del primer cuarto de hora, el Aurirrojo mantuvo el control de la pelota pero sin profundidad en sus intentos. Un remate desde afuera del área de Morales a los 34 minutos y otro de Diego Sánchez Paredes a los 40, no generaron mayores inconvenientes para el arquero rival. Crucero, por su parte, fue de menor a mayor con el correr de los minutos, intentando dar pelea unos metros más adelante con sus volantes. Dispuso de algunas pelotas paradas, pero tampoco supo sacarles provecho.
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| PIDE PISTA. Germán Cochis colaboró en la elaboración y oxigenó la ofensiva ribereña. |
Las emociones llegaron en la etapa complemetaria. A los 11' un tiro libre ejecutado por Héctor Millán no pudo ser despejado por Luis Ardente, la pelota le quedó a Gastón García y su remate fue despejado al corner por Julián Fernández, que había quedado bajo el arco. En ese tiro de esquina llegó la apertura del marcador: el envío al corazón del área fue bien aprovechado por el central Lucas Navarro, que se impuso en las alturas y su cabezazo direccionado al primer palo decretó el 1 a 0 para la visita.
La escuadra sangre y oro sintió el impacto y no halló la forma de volver a lastimar hasta los 29 minutos, cuando un centro del ingresado Germán Cochis derivó en un despeje corto de Bachke y Gabriel Morales en dos oportunidades no pudo encontrar el hueco para llegar a la red.
Al ratito, una equivocación en la salida de Ariel Morales fue aprovechada por Pablo Motta, pero a Klusener le quedó la pelota atrás cuando quedaba mano a mano con Ardente. El Colectivero se animó un poco más a partir de los ingresos de Caruso y Jolod, pero sus insinuaciones no se transformaban en situaciones concretas.
La Dupla Técnica Baroni-Fabro, por su parte, optó por mandar al chaqueño Niz en lugar de Morales a falta de diez minutos. Un minuto después, el cordobés Cochis se hizo cargo de un tiro libre desde la derecha y su envío con rosca fue bien aprovechado por Carlos Salom que la peinó en el primer palo y descolocó a la defensa rival para el 1 a 1.
Sin embargo, no terminaba Boca Unidos de festejar y otra equivocación de Ariel Morales en la salida, puso la pelota en los pies de un solitario Rodrigo Cerdán (otro de los relevos en Crucero). Éste apenas se acomodó y sacó un disparo de derecha que puso el 2 a 1 y transformó la alegría local en frustración. Como había pasado con Gimnasia y Tiro, un empate que costó mucho trabajo se hizo trizas en muy poco tiempo para los correntinos.
Apremiado por el reloj y la obligación de la localía, de inmediato el Aurirrojo se volcó hacia el área rival. Saúl Abecasis, uno de los buenos ingresos en el partido, fue a presionar, robó la pelota por izquierda -a los 39 minutos- y su remate fue tapado por Bachke. Un par de minutos después, Monje ganó un tiro de esquina, Cochis la jugó rápido para Sánchez Paredes y el centro de "Corcho" con buena potencia y dirección fue conectado por Leonel Niz, que le cambió el recorrido a la pelota e hizo estallar a los presentes con el 2 a 2.
No obstante, la defensa ribereña, en otra desconcentración grave, le sirvió un par de posibilidades más a la visita: a los 42 minutos, recuperó Cerdán, abrió hacia la derecha para Jolod, éste mandó un centro y el autor del segundo gol de los misioneros conectó de cabeza pero suave y le facilitó las cosas a Luis Ardente. Los corazones correntinos volvieron a latir. En la siguiente, fue Héctor Millán el que cortó, buscó de nuevo a Maximiliano Jolod y el remate del lateral se fue por arriba.
El final se anticipaba intenso y parecía deparar algo más, pero un choque entre Niz y Gastón García terminó enfriando el partido; ya ninguno de los contrincantes encontró los caminos hacia el triunfo.
Boca Unidos volvió a pagar caro sus problemas con las pelotas paradas defensivas y las desatenciones, incluso pudo haberlo perdido si Klusener o Cerdán hubieran estado más finos. Pero también tuvo coraje para reponerse ante la adversidad. El arranque fue interesante pero se desdibujó con el paso de los minutos, y en el segundo tiempo, los ingresos de Cochis y Niz brindaron frescura para salvar una caída que hubiera sido estrepitosa.
Hay mucho por corregir y la búsqueda del equipo continúa para la Dupla Baroni-Fabro, que necesita empezar a ganar para no alejarse de los puestos que conducen a la próxima instancia del certamen.