El desafío de creer y crecer

Las juveniles ribereñas enfrentarán a Aranduroga en una de las semifinales a partido único del Torneo Oficial de hockey doméstico, para la categoría Sub 19. Después de un cierre de temporada regular por debajo de las expectativas, Boca Unidos intentará revertir la imagen de las últimas presentaciones para ir por el máximo galardón.
 
Nadie puede privar al Boca Unidos Sub 19 de soñar con subirse a lo más alto del podio. No obstante, las muy buenas individualidades tienen que amalgamarse para adquirir mayor consistencia. Hay jugadoras que se han acoplado bien al equipo de Damas Mayores desde el rol de acompañantes, pero en esta instancia deberán mostrar carácter para ser mentoras de las más jóvenes, ya que hay varias sub 16 en el plantel. 
 
"El talento conlleva una responsabilidad" señala un conocido refrán, y ese es el aprendizaje a fortalecer en el tramo final de este torneo que pasó muy rápido. Es cierto también que no hubo mucho tiempo para pulir algunas cuestiones en lo personal y en lo colectivo. Sin embargo, lejos de las exigencias de la inmediatez y los resultados, se trata de dar ese paso adelante en el proceso de maduración, que pondrá en sintonía las cualidades (que en el plantel abundan) con el espíritu competitivo y que contribuirán a consolidar la formación integral, alimentar la unidad de grupo y forjar mística. 

Las aurirrojas culminaron la fase regular en el segundo puesto tras haber caído 2 a 1 ante Jaguareté, en duelo postergado de la primera fecha. Por esto, el rival será Aranduroga, tercer clasificado. Este partido se jugará en cancha de la Asociación Correntina, a partir de las 17:30. El otro finalista, saldrá del duelo que sostendrán las tricolores y Corrientes Hockey, en el turno siguiente.

La estadística a romper, tiene que ver con que las ribereñas no han podido vencer en este certamen a las otras semifinalistas. De hecho, ante Aranduroga igualaron 1 a 1, ante Corrientes Hockey 0 a 0 y ante Jagua sufrieron su única caída en el certamen. Son pequeños desafíos que la juvenil escuadra sangre y oro debe proponerse superar, ya que cuenta con el material necesario para pensar en grande.

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