Y un día volvió a rodar la pelota. Boca Unidos y Brown abrieron la fecha 22 de la B Nacional con la igualdad en 1. Había abierto el marcador Juan Manuel Olivares, desde la vía del penal, y Martín Fabro volvió a poner en pardas el encuentro.
No fue la mejor versión de ambos equipos en el retorno a la actividad oficial. Si intentamos encontrarle una explicación, la falta de ritmo y jugar por los puntos ha sido un factor clave en Adrogué, y en muchos puntos del país que volvieron a ver acción.
Fueron pocas las situaciones de gol que generaron uno y otro equipo. Federico Domínguez tuvo que cambiar el planteo previo por la lesión de Fernando Alloco, cuando transcurrían apenas 20 minutos de partido.
Allí Osmar Ferreyra, habitual mediocampista, pasó a jugar en el lateral izquierdo y la improvisación hizo notarse en varios pasajes, sobre todo cuando el inquieto Cristian Chávez se hacía cargo del balón, aunque terminó sorteando el puesto de manera aceptable.
La más clara fue justamente la del delantero del Tricolor, que se encontró mano a mano con Juan Ojeda para abrir el marcador sobre el final del primer tiempo, pero el arquero se lució y contuvo una pelota clave.
En el complemento, no varió mucho la historia, aunque sí aparecieron los goles. A los 3 minutos, el Aurirrojo se relajó, Brown jugó rápido un tiro libre y Álan Pérez derribó en el área a García cuando quedaba sólo frente al arquero correntino. Penal y gol convertido por Olivares.
Uno de los puntos positivos de Boca Unidos en el partido, fue salir a buscarlo decididamente tras la desventaja. Luego de muchos intentos que no llegaban a generar mucho peligro, German Herrera escapó por izquierda, metió el buscapié y Fabro la encontró. El resultado era justo.
Y así fue. La visita cerró mejor el juego y quedó la sensación que pudo ganarlo, pero el punto no cayó mal en el equipo, ya que intentará revalidarlo con tres juegos consecutivos ante su gente. El primero será el miércoles, en el pendiente de la fecha 7, ante Santamarina desde las 21.