A 13 AÑOS: UNA CLASIFICACIÓN PARA TODA LA VIDA

Hace 13 años, un hecho histórico ocurrió un domingo por la tarde cuando Boca Unidos venció 4 a 2 a Textil Mandiyú en el partido de vuelta de los playoffs por los 4tos de final del Torneo Argentino B. Una llave que además de eliminar a su clásico rival, significó la continuidad para la llegada del tan ansiado ascenso al Argentino A. 

Por Cecilia Medina

Un 6 de mayo de 2007, Boca Unidos enfrentaba a Textil Mandiyú por sexta vez en aquella edición del Torneo Argentino B, y el destino quiso que sea la última de manera oficial. Aproximadamente 10.000 espectadores asistieron al Estadio "José Antonio Romero Feris" del club Huracán para vivir la definición de los cuartos de final con una posibilidad abierta para ambos porque solo se habían un gol de diferencia los separaba por lo sucedido en el partido de ida, en el que el Aurirrojo había superado por 3 a 2 al Albo. 

En la fase clasificatoria ese torneo, ambos rivales se habían encontrado en cuatro oportunidades. En el Apertura, el primer partido fue victoria del Algodonero por 1 a 0; en el segundo, fueron los ribereños los que se impusieron por 2 a 1. El conjunto textil, pasó a la segunda instancia de clasificación y luego a la ronda final.

OTRO PARA EL RECUERDO. En la previa al cruce por los cuartos de final, el Aurirrojo ya propinarle un fuerte cachetazo a su rival por 5 a 0.

En el Clausura, Mandiyú vuelve a repetir el resultado por la mínima en el primer encuentro. Luego, llegará el recordado e irrepetible 5 a 0 de aquel 25 de febrero, la mayor goleada que pudo verse en un enfrentamiento entre ambos. Allí el equipo de "Pomelo" Ribecca finalizó primero en la tabla, llegó a la siguiente instancia en la cual enfrentó a 9 de Julio de Morteros y consiguió su llegada a los playoffs donde lo esperaba su clásico de aquellas épocas, reemplazando al viejo Deportivo que estuvo inactivo por 15 años. 

El 29 de abril comenzó la llave de cuartos con el cuchillo entre los dientes, fue tan así que en los primeros 45 minutos ya habían convertido los cinco goles que definieron el partido de ida. Silvio Giovenale fue quien abrió el marcador para Boca Unidos pero después Mandiyú se lo dio vuelta con goles de Mendoza Sosa y Bauza. Sobre el final de esa primera parte, Giovenale volvió a aparecer para marcar el empate y, en el primer minuto adicional, Cristian Núñez (goleador de la serie) sentenció el 3 a 2.

INMORTALIZADO. En el partido de ida, Giovenale redondeó un partido espectacular con dos goles en su cuenta personal y una actuación sólida en defensa.

Una semana después, y con la ilusión latente por la poca diferencia de goles, volvieron a verse para definir la clasificación a la siguiente fase. En la semana, se vivió como una final y Corrientes vibró al ritmo del clásico esperando el domingo. El escenario era el mismo, solo con algunos grises en el cielo y una temperatura inestable; a los 40' del primer tiempo un disparo al arco de Oscar Gómez se desvió en el pie del Negro Núñez y puso en ventaja a los de rojo y amarillo. En el inicio del complemento, Luis Núñez desbordó por la izquierda y tiró el centro para Osvaldo Mendoza Sosa que marcó el empate. 

Luego de la media hora hora del segundo tiempo, "Oscarcito" recibió en mitad de la cancha tras un pase de Matias Padilla y avanzó con la pelota, encarando a Lisandro Beratz para definir ante el arquero Ariel Ramírez con un remate al primer palo y poner el 2 a 1. Casi diez minutos más tarde, Gómez dio el pase que parecía sentenciar la historia; lo recibió Núñez, quien quedó mano a mano y definió cruzado para aumentar el resultado 3 a 1. 

Mandiyú logró achicar el marcador con gol de Beratz. Pero con una defensa desequilibrada, Manuel Altamirano recibió, aprovechó y corrió hasta la puerta del área para enviar un remate que definió el 4 a 2 y le otorgó la clasificación a Boca Unidos a las semifinales del Torneo Argentino B. Por largos minutos, las tribunas fueron un delirio entre el plantel, cuerpo técnico y los hinchas, que se unieron a la par de un solo canto para festejar semejante logro.

ÉXTASIS AURIRROJO. Los hinchas y los futbolistas, trepados del alambrado, se unieron en un festejo interminable. ¡Y no era para menos!

Un mes después, estos clásicos tomaron mucha más relevancia, porque se bañaron en oro cuando los de Arsenio Ribeca gritaron campeón en Santiago del Estero y conseguían el primer campeonato federal de la historia para el club.
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Fotos: archivo s/f.