Por Adolfo Pereira
Cuando las cosas no salen, siempre es mejor sumar, sobre todo fuera de casa. Era el debut, en un reducto habitualmente complicado y con varias cuestiones aún por pulir en el equipo. Sí, bienvenido el punto.
Un error de cálculo del arquero abrió el camino hacia el gol para la visita, pero hay mérito de Antonio Medina y Gonzalo Ríos en ir a presionar y forzar la equivocación de los rivales. El Tony corrió en persecusión de Álan Vester y Ríos fue sobre Nicolás Maza. El "uno" le pegó mordido y el delantero chaqueño no desaprovechó la oportunidad para convertirle a uno de sus ex equipos. Apenas iban 7 minutos.
Pero el anfitrión asimiló rápidamente el golpe y salió a buscar la igualdad. La pelota parada fue el recurso más utilizado para tratar de dinamitar la defensa correntina y contó con un par de ocasiones claras, en un despeje involuntario que casi se transforma en gol en contra, y luego en la aparición de Diego Magno que se encimó con Leonardo Baima y no pudo direccionar su cabezazo tras centro de Nahuel Gómez. Sin embargo, la tercera fue la vencida, al minuto 32: otro envío de Baima desde la izquierda (de lo más punzante por su sector) fue despejado por Luis Ardente, y en el rebote Gómez remató y la pelota se desvió en Franco Lazzaroni para sorprender al guardavallas correntino.
En el entretiempo, Alfredo Grelak mandó a la cancha a Saúl Abecasis en lugar de Maximiliano Oliva y mantuvo el esquema táctico que planteó inicialmente. Algo insinuó la escuadra sangre y oro con la picardía de Medina. No obstante, las pelotas cruzadas dolían en defensa. Baima llegó al fondo nuevamente y Fabricio Reyes cabeceó al travesaño. Al ratito tuvo otra, pero Ardente atenuó su definición y Lazzaroni despejó en la línea. Su insistencia tuvo premio: a la salida de un tiro de esquina, un envío a media altura de Daniel Carrasco desde la derecha, fue bien aprovechado por la Perla que se coló entre los centrales y cabeceó a la red para darle la ventaja a su equipo.
De arremetida el Aurirrojo, consiguió un tiro de esquina, y allí la sagacidad de Nicolás Marotta le permitió superar a Vester y cabecear al gol para estampar el 2 a 2, tras otra floja salida de Maza, sobre el cuarto de hora.
El local insistió por vía aérea, pero su falta de puntería en la definición incrementaba los nervios conforme el tiempo se agotaba. La última clara estuvo nuevamente en los pies de Nahuel Gómez, que remató alto tras una tapada previa de Ardente.
El cierre dejó mucha tela para cortar. En una pelota dividida en el mediocampo, la temperatura se fue a las nubes cuando chocaron Facundo Pardo y Gonzalo Ríos. Tras algunos empujones entre jugadores de ambos bandos, el juez Nelson Bejas decidió expulsar al defensor del Cuervo y al delantero visitante; y amonestó al Tony Medina por su reclamo. Para hacer más desprolijo el cierre, estiró el tiempo de adición deliberadamente y cuando Boca Unidos pudo salir de contra, con el oponente mal parado, terminó el partido.
Así, el punto sumado cobra valor, pero el precio fue alto por la importancia de Ríos en la ofensiva de Grelak, que tiene mucho para ajustar en el trabajo semanal, de cara a la próxima fecha en el Leoncio Benítez, ante Chaco For Ever.
Foto: Javier Rueda (Realidad Deportiva).