El conjunto sub 19 del hockey aurirrojo goleó a su par de Aranduroga, en una de las semifinales del Torneo Oficial 2021 organizado por la Asociación Correntina. Boca Unidos hizo la diferencia a través de sus individualidades y, en el duelo decisivo, volverá a encontrarse con Jaguareté.
Las juveniles ribereñas pisaron fuerte en semis y se adjudicaron el derecho de luchar por el título en la categoría Sub 19. El sábado por la tarde, hicieron gala de su capacidad ofensiva al vencer 4 a 1 a las cebras, uno de los rivales a los que no había podido superar en la fase regular.
Fue Aranduroga el que tomó la iniciativa en los primeros minutos, intentando administrar la bocha con prolijidad y lateralizando el juego. No obstante, al cabo de unos minutos, Boca Unidos se acomodó en cancha, ganó el mediocampo y a partir de eso creó sus primeras oportunidades. Llegó a disponer de dos cortos en el primer cuarto, pero no pudo capitalizarlos.
En este sentido, la perseverancia y la paciencia fueron fundamentales para arrinconar al oponente y generar el desgaste de su cerrojo defensivo. Mucho tuvo que ver el despliegue de Oriana Noguera, que trazó un surco por el carril derecho.
Un par de cortos más terminaron de quebrar la resistencia albinegra: fue justamente Noguera la que acudió a la segunda jugada, y acomodándose para su derecha definió al rincón antes de que lleguen al cruce sus perseguidoras. El 1 a 0 fortaleció anímicamente a la escuadra sangre y oro, que insistió con sus incursiones al área rival pero se tuvo que conformar con la mínima ventaja al entretiempo.
En la segunda mitad, de entrada Boca Unidos mostró que continuaba en la misma sintonía. Ximena Ramírez se multiplicó por la cancha: ahogó los intentos de avance rival, distribuyó con criterio y fue partícipe activa en la gestación de los goles. El segundo nació justamente de una maniobra suya, que comenzó en campo propio y culminó con asistencia para Julieta Apiolazza, que giró sobre su eje, y sacó un buen remate para establecer el 2 a 0.
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| Se le abrió el arco. Julieta Apiolazza festeja el segundo de la tarde con Xime Ramírez. |
Lejos de conformarse, las ribereñas mantuvieron la misma tesitura, en la que Giuliana Torres y Valentina Morales Barreto, se acoplaron a Ramírez para seguir generando peligro con su movilidad y capacidad de desequilibrio. No obstante, Aranduroga salió del letargo en el cierre del tercer período y en el inicio del último, con una sucesión de cortos que Boca Unidos consiguió neutralizar.
Más allá de estas situaciones, las aurirrojas seguían con la mira fija en el arco de enfrente y una nueva conexión Ramírez-Apiolazza terminó transformándose en el 3 a 0, que parecía sentenciar la historia. Pero las cebras mostraron gallardía y, en un desbalance defensivo del rival, llegaron al descuento a través de Elina Varela.
Aunque el equipo ribereño sintió el golpe, en un par de minutos recuperó la memoria. Una buena jugada colectiva, abrió espacios para Ximena Ramírez que apareció en soledad en el área para meter un misil al ángulo, estampar el 4 a 1 definitivo y convertirse en figura del encuentro.
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| Lo coronó con un golazo. Todas abrazan a la capitana tras la conquista que aseguró la victoria. |
Así, merced a la inspiración de sus individualidades y un equipo que acompañó, pero también al carácter y compromiso que mostraron a lo largo del encuentro, para sostener la intensidad en la marca y el apetito de atacar durante gran parte del juego, el cierre encontró festejando a la escuadra sangre y oro, que se metió en la finalísima.
El próximo finde, en el cotejo por el máximo galardón, Boca Unidos enfrentará a Jaguareté que se impuso 3 a 0 ante Corrientes Hockey, elevando las expectativas de partido a partidazo. Y allá van las aurirrojas, pisando fuerte y soñando con escalar hasta lo más alto.