Cuando se pensaba que Boca Unidos podía prolongar su recuperación en el campeonato y refrendar todo lo bueno hecho el miércoles pasado en el Leoncio Benítez, el equipo volvió a mostrar flaquezas defensivas, poco fútbol, casi sin ideas de tres cuartos de cancha hacia adelante y se pareció más al equipo que jugó el resto del campeonato, en la derrota cosechada ayer por la tarde en Concepción del Uruguay, ante Gimnasia, por la mínima diferencia.
El traspié dejo al Aurirrojo de Roberto Marioni más cerca de la zona de descenso que la de los puestos de clasificación, ya que con solo 20 unidades en sus alforjas, quedó a 10 puntos de Sportivo Las Parejas (hoy el último de ese grupo privilegiado) en la parte superior de la tabla y a cuatro de Defensores de Pronunciamiento, que se hunde en el fondo.
El golpe recibido fue al inicio mismo del juego. Iban solo 5' de partido, cuando el diez Agustín García apareció por derecha demasiado solo (Federico López y Marcelo Cardozo quedaron por el medio de la cancha), enganchó y desairó a Ataliva Schweizer que quedó cubriendo espaldas, gambeteó hacia afuera Lucas De León y resolvió con toque suave ante una valla vacía.
El tanto golpeó duro y sin armas válidas para revertir por parte del Aurirrojo y eso que tuvo una clara, Agustín Lavezzi le ganó a su marcador, pero su disparo tapó con las piernas el arquero Bustos.
En el segundo tiempo, Marioni no cambió nada de movida, como quizás no advirtiendo las deficiencias del conjunto a pesar de la falta de respuestas evidenciada por su once inicial. Antonio Medina primero y un rato mas tarde, Franco, Salom y Espíndola fueron los cambios a los que acudió Marioni, para un equipo que mostró muchas dudas por sus laterales, ya que las vueltas de Fabio Godoy y Federico López no fueron de las más felices. El local se aferró a explotar alguna contra.
A 5' del final, encaró Tony Medina, le cometió falta Leonel López dentro del área y luego de una espera por hinchas locales enojados subidos al alambrado, él mismo se encargó de la pena máxima, pero la tiró afuera, con el balón pegado al palo izquierdo de Bustos.
Allí se esfumó la mínima posibilidad que tuvo Boca Unidos de no volverse con las manos vacías, ante un rival que no hizo mucho más, pero golpeó de entrada y después estuvo expectante para ver si podía meter una contra.
El elenco de la ribera se vuelve sin nada, con un montón de dudas y pensando que en la próxima fecha tendrá que recibir al sólido líder, Racing de Córdoba, que orienta Carlos "Chiquito" Bossio