En su partido 200 en la Primera B Nacional, Boca Unidos bajó al equipo que llegaba como líder e invicto en la Zona A: Gimnasia de Jujuy. El equipo de la Ribera consiguió una gran victoria en Corrientes con goles de Matías Moisés y José Vizcarra, uno en cada tiempo, y ratificó sus aspiraciones de alto vuelo, en un partido en el que le tocó más luchar que jugar.
La fórmula es prácticamente infalible: la mayoría de los equipos que llegan en condición de punteros a Corrientes, generalmente, vuelven a sus pagos con las manos vacías. Fue el caso también de Gimnasia de Jujuy, que dejó su invicto y la punta en la ciudad de las siete puntas.
El Lobo se encontró con un Boca Unidos que salió a presionar y tratar de imponer su libreto en los primeros minutos, algo que también se ha vuelto costumbre. Ésta vez, el empuje surtió un efecto casi inmediato porque, tras corners sucesivos, una pelota recuperada en campo rival fue aprovechada por Escobar para mandar un centro desde la derecha para la entrada de Matías Moisés quien, llegando por el centro, cabeceó a la red y adelantó al local en el marcador.
El rival se sintió tocado, ordenó rápidamente las ideas y comenzó a trabajar en procura del empate. Un par de centros para Osvaldo Miranda que terminaron con frentazos mal direccionados dieron cuenta de que la visita no vino a ser un mero "partenaire".
Otra alarma se activó para los de rojo y amarillo tras un avance de Danelón. El lateral derecho terminó tirado en el fondo del campo de juego, a metros del arco custodiado por Ojeda en ése período. El "Chiqui" debió ser sustituido por Marcelo Ortíz, que sumó así sus primeros minutos en la temporada.
Boca Unidos se retrasó en el campo y cedió iniciativa, pero dispuso de un par de aproximaciones más, una de ellas con Raymonda como protagonista, realizando un slalon fantástico en el área y ejecutando un disparo que salió más alto de lo esperado por un desvío en un rival.
En el complemento, el Lobo empezó picante, con el colombiano Luis Peralta imponiendo su potencia por izquierda y armando una gran jugada que definió muy mal. El conjunto norteño se fue adueñando del trámite y cercando a un Aurirrojo que alcanzó a romper la presión en alguna ocasión, como la patriada del Tata Escobar que cortó a la salida de un corner, y con el rival mal parado avanzó hasta el arco contrario pero Ojeda obstaculizó su remate y salvó la segunda caída de su valla.
El panorama se mostraba oscuro para el anfitrión que agotó variantes por lesión: al minuto del segundo tiempo, Barrado se retiró con una molestia en el posterior izquierdo y, sobre los 28' Marino, quien lo había reemplazado, también dejó el campo de juego, ingresando Pablo Vergara en su lugar.
Y el neuquino mostró credenciales enseguida, porque le bajó muy bien al Chino Vizcarra un centro pasado de Marcelo Ortíz. El goleador, por su parte, mostró toda su categoría para enganchar ante la marca de un defensor, y definir sutilmente frente al achique del arquero jujeño.
Gimnasia perseveró para tratar de llegar al descuento y estuvo cerca con los intentos sucesivos del ingresado Abraham (se lo perdió bajo el arco), el ex Aurirrojo Lucas Acosta (su derechazo dio en el travesaño), y la doble jugada de Domínguez y Martinena. Ninguno pudo torcer un destino que se le había retobado al Lobo.
En los minutos finales, el Aurirrojo se dio cuenta que lo ganaba y dispuso de tres situaciones más, pero Ojeda impidió que la distancia fuera mayor para el equipo correntino, que terminó celebrando junto a su gente el pitazo final de Silvio Trucco.
FICHA DEL PARTIDO (Click en la imagen para ampliar)
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La foto que ilustra la publicación pertenece a Después del Juego
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