En las puertas del tetra

El primer equipo de cestoball de Boca Unidos se llevó el primer punto de la serie final del Oficial 2021 ante Regatas, a quien derrotó por 99 a 74, y quedó a un triunfo de conseguir el ¡tetracampeonato!. El jueves que viene, el segundo partido se jugará en el Parque Mitre y las Guerreras estarán ante otra cita que puede quedar en la historia del deporte correntino.

El escenario del Club Colón, donde las ribereñas establecieron su localía, fue testigo de un partido que se tornó vibrante. No solo en el rectángulo de juego, sino también con el colorido y el aliento que bajó desde las tribunas.

El primer duelo fue propio de dos equipos que se conocen muy bien, mas allá de algunas variantes en los planteles de las últimas temporadas. Paridad y nerviosismo fueron las cualidades que marcaron el trámite en los minutos iniciales, con Milagros Díaz gravitando para Boca Unidos y Ana Laura Martínez lastimando a la defensa roja y amarilla.

Con el correr de los minutos, el juego se fue haciendo cada vez más hablado y con mucha fricción, momento en el que los jueces mostraron rigurosidad para controlar el termómetro y la tensión propia de lo que estaba en juego.

Sobre el final del primer segmento, el conjunto de la Ribera pudo despegarse mínimamente en el tanteador. La capitana local Eliana Acosta se llevó todas las miradas y fue la protagonista del cierre, primero pasando mitad de cancha y convirtiendo un doble y luego con un espectacular bombazo de tres puntos, apenas un instante previo al sonido de la bocina. Al descanso largo se fueron con el Aurirrojo al frente por 44-38.

En el complemento, el elenco dirigido por el "Negro" Miño se empezó a soltar, la ofensiva fluyó y quebró todo tipo de estrategia que le había funcionado hasta el momento al Remero. Juliana Miño, la estandarte ribereña, logró liberarse de un férreo marcaje individual que le propuso el rival y mostró todas sus variantes técnicas para sumar en el tanteador y ayudar a su equipo a asegurar el primer punto.

Como si eso fuera poco, cuando las chicas se imponían por 79 a 64 y empezaban a decretar el triunfo, Regatas quedó en inferioridad numérica por unos minutos debido a la expulsión de Marina Raimondo por doble amarilla.

Ya los instantes finales, fue un concierto de Boca Unidos. Y Milagros Díaz, como es habitual, le puso el broche de oro al triunfazo con un triple al filo de la chicharra, que marcó el final del partido.

Cuando el zapato apretó, las Guerreras afilaron sus armas y volvieron a poner las cosas en su lugar. Fiel a su espíritu y a lo que nos acostumbraron en las últimas tres consagraciones. La cuarta está a la vuelta de la esquina, y la oportunidad de meterse en las páginas más gloriosas del deporte correntino también.

Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente