Boca Unidos no se ha retirado aún del mercado, ya que aspira a contar con al menos un par de futbolistas más, de características ofensivas. Para esas vacantes, cuatro son los nombres entre los que podría definirse esta cuestión, aunque hay un par de ellos cuya continuidad no será sencilla, por razones económicas.
Por Adolfo Pereira
De los nombres que trascendieron (no deberíamos descartar la posibilidad de un "tapado"), Boca Unidos aspira a contar con al menos dos para definir el plantel profesional que encarará la preparación para el próximo torneo de transición, a disputarse en el primer semestre del 2016.
Hablamos de Fernando Zampedri, Nicolás Silva, Gonzalo Ríos y Antonio Medina. De los cuatro, Zampedri y Silva son las alternativas más "lejanas" en el horizonte aurirrojo, ya que aspiran a una mejora sustancial en sus contratos. En ambos casos, lo económico iría de la mano con la posibilidad de subir de categoría y jugar en Primera División.
En la jornada de ayer, medios de Buenos Aires señalaron que Huracán hizo un ofrecimiento por el goleador de la última B Nacional, pero según él mismo manifestó, no está satisfecho con esa oferta. En el caso de Nicolás Silva, si bien el jugador manifestó su deseo de continuar, el representante aspira a un incremento en su sueldo, que Boca Unidos no podría equiparar.
Por su parte, Gonzalo Ríos finaliza su préstamo en el León de México, y se le ofrecerá la opción de seguir al menos seis meses más en el club, en caso de que no aparezca una posibilidad de compra del pase, por parte de otro club.
En tanto que Antonio Medina evalúa la chance de seguir en Gimnasia de la Plata, o cambiar de aire para tener mayor continuidad. Desde esa perspectiva, Boca Unidos aparecería como un buen lugar para sumar minutos protagónicos y estar cerca de sus afectos.
La dirigencia aurirroja buscará cerrar a dos de estos cuatro futbolistas, para sumarlos a los que iniciarán los trabajos precompetitivos en los primeros días de enero.