NO REACCIONA


De nuevo madrugaron a Boca Unidos. En la primera llegada del partido, el local se puso en ventaja y el Aurirrojo no encontró respuestas para torcer el rumbo del partido. El equipo correntino sigue dejando puntos en el camino y su situación se agrava, cuando todavía quedan doce puntos en juego.


No había terminado de acomodarse en la cancha, y Boca Unidos ya se encontraba en desventaja. La jugada comenzó con un remate desde afuera del área que Ojeda no pudo controlar y su rebote hacia el medio derivó en un atento Jorge Córdoba, que apareció entre los centrales para inflar la red y llevar un poco de alivio a un Douglas comprometidísimo. No terminó la cosa ahí, porque el envión anímico llevó al dueño de casa a tener otras dos chances importantes que no pudo concretar. 

Lentamente, Boca Unidos empezó a transitar su habitual calvario, con las destrezas de siempre para progresar hasta tres cuartos de campo rival, pero con las mismas dificultades para poner pelotas de peligro en el área rival y generar ocasiones.

En el complemento, la visita se adueñó del trámite. Esta vez, los cambios sí favorecieron la propuesta de Bassedas, que sacó a Ríos en el entretiempo, y a Núñez y Fabro, más adelante, para disponer de piernas frescas, ante un césped pesado por las condiciones temporales. El Aurirrojo intentó bastante por izquierda, donde las batallas individuales entre Herrera y Bazán, marcaron la tónica de una etapa que se jugó a dientes apretados. 

Faltó claridad, lamentablemente, porque en las intenciones Boca Unidos mostró el deseo por empatar, que no pudo refrendar desde lo futbolístico. Hasta lo último, fue el conjunto dirigido por Bassedas, que tuvo en los pies de Valsangiácomo la última posibilidad, pero el delantero no pudo acomodarse y Argüello se quedó con la pelota de la noche. 

Doce unidades quedan en juego, Boca Unidos debe reaccionar de inmediato, si quiere evitar las llamas de la zona en la que nadie quiere estar.

Foto: Semanario El Tiempo (Pergamino)
Artículo Anterior Artículo Siguiente