Solo tres días nos separan del debut de Boca Unidos en el Federal A ante Central Norte como visitante y, en vistas a ese partido, Alfredo Grelak buscó el equipo durante toda la semana variando el esquema y la cantidad de defensores, algo que no pudo realizar en la pretemporada por la cantidad de lesionados.
El Aurirrojo transita sus últimas horas previas al estreno en el Torneo Federal A, luego de dos meses de una preparación que no fue para nada fácil en cuanto a lo futbolístico. Cuando empezó a jugar amistosos, el entrenador no pudo contar con más de seis futbolistas lesionados y eso complicó el proceso de armado del equipo ideal.
Pero la buena noticia es que gran parte del equipo ya está a disposición hace una semana, justo para ultimar detalles de cara al duelo del domingo a las 17 ante el Cuervo. Y ante esta recuperación, el entrenador empezó a mover piezas de acuerdo a las características del plantel.
Cuando contó con casi todo el personal, probó la flexible línea de tres/cinco que se volvió tema de debate con recurrencia por estos tiempos. Allí estuvieron Luis Ardente en el arco; Nicolas Marotta, Ariel Morales y Franco Lazzaroni en el fondo; Santiago López De Marchi, Iván Silva, Diego Sánchez Paredes, Carlos Arriola y Maximiliano Oliva en línea del medio; Antonio Medina y Gonzalo Ríos en la delantera.
Luego, con llegada de las últimas incorporaciones y casi que en el cierre del mercado de pases, Grelak y su cuerpo técnico volvieron al 4-4-2 en la práctica futbolística. Allí Lopez De Marchi y Oliva se ubicaron en defensa y salió Marotta, que liberó un espacio en el lado derecho del mediocampo para Martín Peralta. Arriola, uno de los pocos de perfil zurdo, siempre por ese costado y el cambio táctico de Sebastián Luna por Sánchez Paredes. La delantera, de un rendimiento óptimo, no se tocó.
En estos entrenamientos previos al debut, volvió a probar con el esquema de tres defensores en ataque y cinco en el retroceso. Allí fue Luna quien se corrió a la derecha, ingresó Marotta como líbero (acompañado por Morales y Lazzaroni) y Oliva se mantuvo por izquierda. Quien dejó su lugar fue Peralta para el regreso de Sánchez Paredes, que junto a Silva y Arriola completaron el mediocampo. Nuevamente la dupla Medina-Ríos estuvo firme adelante.
Uno cuando va repasando los nombres, todo da a entender que restarán detalles del equipo a resolver en la mente del cuerpo técnico porque muchos de ellos se repiten. Todo hace pensar que Ardente, Morales, Lazzaroni, Oliva, Silva, Arriola, Medina y Ríos tienen su lugar asegurado, es decir, más del 70% del equipo. Pero aún no podemos descartar nada teniendo en cuenta que se empiezan a ver los primeros gustos futbolísticos de Grelak, un poco conjugado con las características que cuenta en sus dirigidos.
Boca Unidos tendrá su última práctica el viernes y tomará viaje al norte por la noche, para alojarse el día previo y esperar el encuentro del domingo en el Estadio Padre Ernesto Martearena.